Utlanak, una niña de 12 años con rasgos anfibios, que despierta en un cráter seco, lejos de la civilización. Sin saber cómo llegó allí, Utlanak se encuentra con Sascab, una figura oscura que la sigue y amenaza. Desorientada, es transportada inesperadamente a distintos lugares por medio de su hipo. Mientras trata de entender lo que sucede, Utlanak busca desesperadamente regresar a su origen, guiada solo por su intuición.

En un enfrentamiento final, Sascab intenta destruir sus esperanzas y le repite que no pertenece a ese mundo y que lo que busca no existe. A pesar de esto, Utlanak no se da por vencida. Su esperanza por encontrar a su madre se fortalece, cuando su voz resuena, alentándola a no rendirse.  Utlanak, emite su último hipo, que  la guía hacia un manantial, su lugar de pertenencia. Sumergida en el agua, Utlanak finalmente encuentra a su madre Sayab.